Desde este humilde rincón nos preguntamos ¿porque se esmeran en poner cosas que no son televisivas y a las que le falta producción para estar en televisión?
Lo que ocurrió es que en Alrmozando con Mirtha Legrand se presentó a modo de avance el musical que hace "honor" a Rafaella Carra "Ella".
El punto es que el almuerzo venía super tranquilo e interesante de una mesa de talento. Estaban Iñaki Urlezaga y Paula Robles con motivo de su próxima presentación en el Luna Park. Además estaban Reina Reech y Gustavo "el negro" Carrizo, el coach y coreografo de Robles en Bailando.
Venía de un muy buen nivel, interesante, con el estilo medido de Mirtha Legrand. Pero al final se fue tdo al diablo.
La presentación en "popurrí" de las principales canciones del musical "Ella" fue cualquier cosa. Por empezar el estudio es diminuto y no hay espacio para un ballet, fue triste ver a los bailarines cruzándose entre ellos. Además el sonido en vivo, eso de insistir con lo auténtico no da sus frutos, el audio se escuchaba pésimo, demasiado como cantado en el living de casa. Y no se entendió nada (regularmente lo que hace Ambrosio no se entiende) pero no vimos más que canciones de Rafaella Carra cantadas por 3 desconocidos sin mucha gracia.
Los últimos 15 minutos de almorzando apestaron.
Lo que ocurrió es que en Alrmozando con Mirtha Legrand se presentó a modo de avance el musical que hace "honor" a Rafaella Carra "Ella".
El punto es que el almuerzo venía super tranquilo e interesante de una mesa de talento. Estaban Iñaki Urlezaga y Paula Robles con motivo de su próxima presentación en el Luna Park. Además estaban Reina Reech y Gustavo "el negro" Carrizo, el coach y coreografo de Robles en Bailando.
Venía de un muy buen nivel, interesante, con el estilo medido de Mirtha Legrand. Pero al final se fue tdo al diablo.
La presentación en "popurrí" de las principales canciones del musical "Ella" fue cualquier cosa. Por empezar el estudio es diminuto y no hay espacio para un ballet, fue triste ver a los bailarines cruzándose entre ellos. Además el sonido en vivo, eso de insistir con lo auténtico no da sus frutos, el audio se escuchaba pésimo, demasiado como cantado en el living de casa. Y no se entendió nada (regularmente lo que hace Ambrosio no se entiende) pero no vimos más que canciones de Rafaella Carra cantadas por 3 desconocidos sin mucha gracia.
Los últimos 15 minutos de almorzando apestaron.
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