Santiago del Moro tomó la palabra en la gala de Gran Hermano para referirse a la detención de Marcelo Corazza, quien fue detenido el lunes por la mañana en una investigación sobre corrupción de menores. El conductor expresó su repudio ante la acusación, afirmando que "como persona, como ser humano y como papá", le cuesta mucho llegar a un lugar así. Aseguró que espera justicia absoluta y que, en caso de ser culpable, merece el peor de los castigos.
Telefe comunicó que Corazza fue "suspendido preventivamente" hasta que se aclare la situación y que colaborarán con la Justicia en todo lo que sea requerido. Del Moro afirmó que él también tiene las mismas dudas que los televidentes y que no conoce a Corazza más allá de algunos cruces en el estudio. Todos los empleados de la emisora están en shock y esperan una justicia absoluta en el caso.
El conductor de Gran Hermano aprovechó la oportunidad para aclarar que Corazza no es el hombre a quien los jugadores de la edición de este reality llamaban Gran Primo. Su función era la de ubicar a los que querían ver el programa en vivo y recibir a los participantes cuando abandonaban la casa. "Gran Primo es otro productor que habla con los chicos con una voz distorsionada", aclaró Del Moro. En representación de sus compañeros, pidió justicia y aseguró que nunca han tenido un trato inadecuado con los chicos.
La detención de Corazza fue un shock para todos los empleados de Telefe. Aunque ha trabajado en la emisora durante más de 20 años, Del Moro afirmó que no lo conoce personalmente y que solo pide justicia en el caso. La acusación de corrupción de menores es espantosa y como ser humano y padre, le cuesta mucho llegar a un lugar así. Espera que se aclare la situación pronto y que se haga justicia en caso de que Corazza sea culpable.
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